noviembre 06, 2009

gris...

I
Un gris despertar

Era una mañana de esas donde a pesar de que gracias al horario de invierno en turno el sol ya asomaba por la ventana entre las 6 y las 7 de la mañana, las nubes habian decidido mantener al sol cautivo un par de horas mas, Joaquin llevaba ya un par de meses levantandose al sentir los rayos de sol entrar entre sus persianas, pero no esta mañana, no señor, esta mañana el clima era nublado y las calles estaban pintados de un monotono y aburrido color gris.

Cuando habia dormido mas de lo que necesitaba, sus ojos se abrieron como si sus parpados hubieran sido impulsados, por pequeñisimos resortes en sus pestañas, miro el reloj en su telefono celular, para darse cuenta de que ya hacia dos horas que debia estar despierto y que sus clases habian comenzado hace una, no tenia nada mas que hacer su vida era ir y venir de la escuela, hacer las tareas, estudiar para sus examenes y nada mas, ¿que haria con su dia en esta ocasion donde ya era demasiado tarde para ir a la escuela? ¿que haria ahora que comenzaba a sentir ese dolor de cabeza propio de cuando pasas demasiado tiempo acostado? como si su cuerpo le dijiese "venga ya, huevon haz algo con tu maldito dia", despues de un buen rato de mantener esa pequeña batalla interna que todos mantenemos de vez en cuando entre la necesidad de levantarse de la cama y el comfort de permanecer recostado, consiguio sentarse sobre su cama, quedando de frente viendo hacia su televisor, tomo el control remoto y prendio el aparato, este estaba puesto en uno de esos programas donde se presentan testimonios-dramatizaciones, de gente que asegura haber estado en contacto con entes de naturaleza para-normal.

"Que estupidez!", pensaba joaquin "¿como puede alguien entretenerse viendo algo asi?, todo se queda en supuestos basados en lo que una persona que tenia ganas de salir en television cree haber visto alguna vez", sin embargo simplemente dejo la tele encendida.

¿por que? ¿por que no? joaquin no estaba interesado en prevenir el calentamiento global ahorrando electricidad, ni tenia que preocuparse por pagar exorbitantes cuentas de electricidad, pues el vivia en un pequeño cuarto que le rentaba una señora y solo le pedian una fraccion relativamente pequeña de las cuentas que debian pagarse, era un buen trato, de esos que no se consiguen todos los dias, pero tambien habria que tomar en cuenta que la señora Godinez era una amiga de la abuela de Joaquin de mucho tiempo atras.

"nada que hacer, nada que ver" era la sensacion general en su mente, en la tele encendida la gente contaba historias de fantasmas, mientras joaquin buscaba su reproductor de musica, pocas cosas le producian tantas emociones como la musica, esta se habia vuelto indispensable en su vida, aunque la musica que escuchaba estaba estrechamente relacionada con su estado de animo, asi que en un dia donde un pesado ocio se tornaba lentamente en una apatia generalizada, el simplemente dejaba el reproductor en aleatorio pasando de una cancion a otra, ninguna le transmitia nada, ninguna lo sacaba de su apatia aparentemente irremediable.

Paso cerca de una hora tratando de encontrar en su musica un refugio a la gris sensacion que lo inundaba, hasta que finalmente le cayo el veinte de que tal vez la musica no era la respuesta en esta ocasion y simplemente dejo su reproductor sobre su escritorio, despues miro de reojo su consola de videojuegos, "los videojuegos no fallan ¿o si?" caminando hacia el control con el que habia pasado horas tras horas drenando su cerebro y dejando que su imaginacion se marchitara como los genitales de un empleado de una planta nuclear, se detuvo un momento para mirar por su ventana, el dia no prometia en absoluto, un cielo nublado, un sol apenas perceptible y una calle vacia. "¿que mas da?" decia la vocecita dentro de su cabeza mientras Joaquin tomaba las llaves de la casa, se ponia una de sus tan acostumbradas sudaderas y se dirigia hacia la puerta...¿que mas da?

En cuanto abrio la puerta se dio cuenta de que hacia mucho mas frio del que el percibia desde la ventana de su habitacion, no era un frio al que te acostumbras con facilidad, ese que se te olvida despues de unos minutos caminando por la calle, este era un frio insistente y no desaparecia, por mas que frotaba sus manos como si tratase de que estas se encendieran en llamas.

No tenia a donde ir, pero no tenia ganas de seguir caminando por la calle con este frio que le resultaba tan insoportable, decidio caminar hasta la calzada mas cercana a su casa, donde tomaria un micro bus que lo llevara a cualquier lugar, entre mas lejos estuviera el destino seria mejor, pues mas tiempo tendria para acurrucarse y refugiarse de este incomodo clima.

Cuando finalmente llego a la calzada iba a tomar el primer micro que cruzo por su camino. Un vehiculo que parecia estar hecho de pedacitos de lamina soldados entre si, con forma mas bien como de caja de zapatos con ruedas, probablemente propulsado por un motor de vocho, una vision bastante comun en esta ciudad, vehiculos de pasajeros hechos por la misma gente que los maneja, un concepto un tanto "madmaxesco", echando carreras de un semaforo al otro, con todo y sus cuarenta y tantos pasajeros, supongo que eso le añade un poco de dificultad extra, Joaquin solia hablar de lo entretenido que podria ser convertir estas carreras de microbuses en una especie de deporte nacional "...despues de todo los gringos tienen carreras en trailers, yo pagaria por ver carreras de micros...", decia.

Pero dejo al primer vehiculo pasar sin intentar hacerle la parada, demasiada gente, habia gente sentada, habia gente parada y si fuera por los choferes tan encantadoramente negligentes habria gente sentada sobre los que estan sentados y gente acomodada de forma horizontal sobre la gente que esta parada, como si se tratase de un juego de tetris. Asi que espero y dejo pasar un par de cajas de zapatos mas, antes de subir a un vehiculo que se veia relativamente mas comodo, o por lo menos uno donde se veia que habia un lugar para sentarse. Subio, se sento al lado de una ventana junto a una señora con unos gluteos ligeramente prominentes, por asi decirlo, recargo su cabeza en el cristal, fijo su vista en la acera que quedaba frente a el mientras el semaforo cambiaba a verde y el viaje comenzaba.

1 comentario:

Anónimo dijo...

promete no?
y luego?